Ayer en horas de la tarde, mientras jugaba uno de sus partidos habituales de fútbol murió de forma accidental, Danna Gisel Guarín Arguello.

Ésta joven niña, a sus cortos once años de edad, ya había logrado grandes cosas gracias al talento artístico que le permitía interpretar con su voz, lo mejor de la música llanera.

Justamente su familia de artistas, los que hoy se encuentran destrozados por  su partida, fueron los que le inculcaron a Danna ese amor por el canto, por eso  desde sus cortos cuatro años empezó a abrirse camino en la música. Había representado a Colombia en un escenario de Estados Unidos y el año anterior  hizo parte del reality Factor XF del canal RCN, junto a su padre, madre y abuelo, con el grupo Dinastía Llanera.

Era hincha fiel del Nacional, le encantaba el fútbol y por eso junto a sus asuntos artísticos también dedicaba su tiempo a practicarlo en una reconocida escuela de la ciudad de Villavicencio llamada “El Viejo Patiño”. Precisamente en una cancha, mientras sin saberlo desempeñaba  su último papel de arquera, el destino le jugó una mala pasada y el arco donde estaba tapando, le cayó encima, provocando heridas letales en su cabeza.

A pesar que fue llevada inmediatamente a la clínica más cercana, sus signos vitales ya no respondían. Según versiones de testigos que se encontraban en el lugar, un fuerte ventarrón, habría provocado la caída del arco, justo en donde ella se ubicaba para no dejar que entrara la pelota del equipo contrario.

La arquera numeró 34 de potente voz no acompañará más a su equipo, ni seguirá engalanando con versos al llano y a Colombia.