Miércoles, 23 Diciembre 2020 05:50
Un suboficial de la Armada murió tras un atentado terrorista en Arauca
Escrita por Casanare Noticias
Se trata del Sargento Segundo, Javier Enrique Caicedo Velásquez, Técnico en Antiexplosivos de la Armada Nacional en Arauca.
El uniformado murió cuando recibía atención médica en la unidad de urgencias del Hospital San Vicente donde fue trasladado luego de recibir la explosión del cilindro bomba que activaron guerrilleros en el sector de Monserrate, zona rural de Arauca.
El suboficial y otros uniformados se trasladaron al sitio a adelantar las diligencias de levantamiento del cuerpo de una persona de nacionalidad venezolana quien había sido asesinada donde también resultó lesionado un menor de edad.
En la inspección y aseguramiento del área para permitir el ingreso del personal del Cuerpo Técnico de Investigación CTI para cumplir con la diligencia de levantamiento del cadáver, los guías caninos localizaron un cilindro bomba cargado con explosivos que al ir a verificarlo fue activado por los subversivos.
En el hecho resultó herido el comandante de la Seccional de Investigación Criminal Sijín de la Policía Nacional, Capitán Andrés Felipe Ortiz, quien fue llevado a cirugía y se encuentra con pronóstico reservado, así mismo, el patrullero de esta misma especialidad, Miguel Ángel Medina, quien presentó heridas en las piernas por las esquirlas del artefacto.
En la zona delinquen integrantes de la Comisión Rafael Villamizar del ELN y disidentes de la estructura décima de las Farc, quienes serían los responsables de este atentado terrorista.
Fuente: Arauca Noticias
Publicada en
CN
Etiquetado en
Últimos de Casanare Noticias
- Luz verde al superávit en Casanare: Asamblea aprueba $29.000 millones en primer debate
- Infraestructura, seguridad y fin a la "Paz Total": Las propuestas de Claudia López para llegar a la presidencia
- El impacto positivo que tiene el PAE en la generación de empleo
- En pausa nuevamente la elección del contralor departamental
- Condenan a 14 años a mujer que drogaba a sus víctimas con medicamentos veterinarios para después robarlos