Con el objetivo de enfrentar la creciente amenaza de los incendios forestales, desde el orden nacional se anunció la realización de una serie de talleres sobre el manejo integral del fuego.
La actividad es liderad por Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), la FAO, Action for Forestry, el Ministerio de Agricultura y la Dirección Nacional de Bomberos de Colombia (DNBC).
El ciclo de capacitaciones denominado “Fortalecimiento territorial en la gestión de incendios forestales”, se realizarán durante este mes de julio en Huila, Casanare y Santander.
Estos espacios de formación están dirigidos a comunidades, autoridades locales y actores clave del territorio, y se basan en el Manejo Integral del Fuego (MIF), una estrategia que va más allá de la extinción, abarcando prevención, mitigación y comprensión ecológica del fuego.
Los talleres se desarrollarán con una metodología altamente participativa, promoviendo el intercambio de saberes y la colaboración interinstitucional.
Entre las actividades destacadas están la identificación y mapeo de zonas críticas con herramientas tecnológicas de libre acceso. Cultura y ecología del fuego, mediante actividades lúdicas y experiencias comunitarias.
También se abordarán temas de prevención y mitigación, integradas en la planificación territorial. Simulación de incendios de gran magnitud, donde los participantes asumirán roles estratégicos.
Cada taller contará con 50 participantes por departamento, incluyendo bomberos, brigadas forestales, líderes comunitarios, entidades operativas y autoridades ambientales.
Este ciclo cobra especial relevancia tras la radicación del Proyecto de Ley No. 557 de 2025, que busca establecer lineamientos para el MIF, restauración ecológica y coordinación interinstitucional.
La iniciativa busca fortalecer capacidades locales y sentar bases para una gestión sostenible del riesgo en los territorios más afectados.
Con más de 6.293 incendios forestales registrados en 2024 y más de 216 mil hectáreas afectadas, Colombia enfrenta una urgencia ambiental que requiere respuestas coordinadas y sostenibles.
Estos talleres representan un paso firme hacia la construcción de resiliencia, la protección de ecosistemas y la seguridad de las comunidades rurales.